Esta semana te invito a seguir investigando sobre tus necesidades básicas para ser feliz.
Estas necesidades, en ocasiones nos son muy difíciles de encontrar porque en nuestra niñez, no han sido del todo cubiertas. Te has ido construyendo un ego fuerte, para adaptarte a esas necesidades no cubiertas de amor, de seguridad, de escucha, de entender tu sufrimiento y ahora, esa capa que reside en nosotros, obstaculiza el poder definir aquello que necesitas hacer para sentir que la vida te gusta y que tu vida te gusta.
Encuentra momentos de silencio, de paz y reflexiona sobre aquello que debes hacer casi todos los días, casi todas las semanas para sentirte bien. Una vez que estén definidas, vigila y mima esas necesidades y no las abandones porque te estarás abandonando a ti mismo.
Recuerda que esas necesidades pueden ir cambiando a lo largo de tu vida, revisarlas de vez en cuando es muy saludable y enriquecedor.