Esta semana, durante la sesión en el centro penitenciario, ocurrió algo inesperado, completamente habitual en este tipo de sesión, que me hizo reflexionar sobre a qué y a qué no estamos dispuestos para cambiar nuestra vida.
Salir de nuestra zona de confort es algo muy incómodo para la mayoría y la resistencia ante esto, suele cerrarnos muchas oportunidades de mejora. Situarnos en la queja, sentir la injusticia de la vida y tomar posicionamientos completamente pasivos, nos sirven de excusas permanentes para no avanzar.
Como cada semana, te invito a indagar sobre esto a través de
- Post Semanal
- Práctica formal
- Práctica informal
- Instrucciones para tu diario de Mindfulness
- Noticias y enlaces de interés
- Imagen de la semana