La toma de conciencia de aquellas situaciones en las que nos sentimos avergonzados o tímidos, nos ayudan a identificar esa voz critica que todos tenemos y que poco nos ayuda en los momentos en los que nos sentimos inseguros.
Si te ves en una de estas situaciones, no te dejes abrumar por las emociones que se desencadenan y tan solo dedícate a observar tus pensamientos y tu cuerpo. Identifica esa voz crítica, identifica su origen, su tono, su vocabulario y sobre todo, observa como te afecta en tu cuerpo.
Mira tus sensaciones corporales , respira, relájate en la medida de lo posible y tan solo hazte consciente de que estás sintiendo vergüenza, algo que nos pasa a todos y que debemos dejarla pasar y punto, sin quedarnos atrapados en ese mensaje interno crítico o esas sensaciones desagradables de nuestro cuerpo.