Esta semana te propongo conciencia en tus comidas emocionales.
Todos hacemos ingestas del tipo emocional y te propongo una reflexión:
¿desde dónde estoy comiendo esto? ¿desde tapar un sentimiento, o para evocarlo?
No es lo mismo comer para tapar una tristeza o comer para premiarme algo que ha supuesto un gran esfuerzo, pero al final, todo es emocional y objetivamente, nada es necesario para nuestra nutrición.
No pretendo que dejes de comer, pero si, que lo hagas de forma consciente y no pasarnos el día engullendo sin sentido y sin conciencia, por ti, por tu salud