- Elige un momento para disfrutar conscientemente
Durante el día, identifica un instante que sea placentero o especial. Puede ser algo tan simple como disfrutar de tu café matutino, sentir el calor del sol en tu piel, escuchar la risa de un ser querido o compartir una conversación interesante. No busques algo extraordinario; enfócate en lo cotidiano. - Detente y pon atención plena
Una vez que identifiques el momento, haz una pausa consciente. Detén lo que estés haciendo y dedícale toda tu atención a ese instante. Observa lo que está ocurriendo a tu alrededor y dentro de ti con curiosidad y apertura. - Conecta con tus sentidos
Usa tus cinco sentidos para enriquecer la experiencia:- Vista: Observa los colores, las formas y los detalles a tu alrededor.
- Oído: Escucha los sonidos que te rodean, incluso los más sutiles.
- Olfato: Si hay algún aroma en el ambiente, percíbelo con atención.
- Gusto: Si estás comiendo o bebiendo, saborea cada bocado o sorbo.
- Tacto: Nota las texturas, temperaturas o cualquier sensación física en ese momento.
- Permítete sentir la alegría del momento
No tengas prisa por pasar al siguiente asunto. Deja que el disfrute, la gratitud o la calma te envuelvan. Nota cómo se siente en tu cuerpo y en tu mente. - Cierra con una reflexión breve
Antes de continuar con tu día, tómate unos segundos para reconocer lo especial de ese instante. Puedes decirte mentalmente algo como: “Este momento ha sido bueno para mí” o simplemente agradecer por haberlo vivido.
Imagina que estás compartiendo un café con un amigo. En lugar de mirar el móvil o pensar en lo que harás después, decides estar presente. Miras a tu amigo mientras habla, escuchas su voz con atención, sientes el calor de la taza en tus manos y saboreas el café. Te das cuenta de cómo esa conexión te hace sentir y disfrutas plenamente del momento.
Esta práctica no busca que «crees» momentos extraordinarios, sino que aprendas a apreciar lo que ya está ocurriendo en tu vida. Al hacerlo, fortaleces tu capacidad de estar presente, incrementas tu bienestar y enriqueces tu día a día con pequeñas dosis de alegría consciente.
Inténtalo hoy y nota cómo cambia tu percepción de los momentos cotidianos. ¡Disfruta! 😊